Escoger el polvo adecuado para tu tono de piel, y características es indispensable para que tu cara se vea bien.
Polvos para Rostros
Los polvos traslucidos: no son invisibles o transparentes. Son ideales para aplicarte después de la base. Logra sellarla y evitar que tu piel brille. Por lo general son sueltos y tienen una apariencia un poco densa.
Polvos compactos: son ideales para retocar el maquillaje puesto en la mañana. Son perfectos si quieres verte muy natural. Es importante que los cuides porque se rompen fácilmente. Si los dejas caer o los arrojas en tu cartera sin un estuche, con seguridad se te romperán.
El “Blush”: es usado para crear un look saludable, lleno de vida y resaltar tus mejillas. Si quieres verte natural escoge el color con un tono un poco más abajo del que quedas después de hacer ejercicio. Para aplicarlo sonríe y echátelo en los “gorditos” o bolsas que se te hacen justo debajo de los ojos